“La más interesada en que hable ‘Martín Llanos’ soy yo”: Exalcaldesa de Monterrey Aleyder Castañeda.
Con la serenidad que da el tiempo, pero con la firmeza de quien no ha renunciado a su dignidad, Aleyder Castañeda, exalcaldesa de Monterrey, habló con marthacifuentes.com sobre su historia marcada por la violencia paramilitar, de alias “Martín Llanos”, su condena judicial y su esperanza de restitución de derechos civiles y un proceso de verdad y reconciliación que beneficie a las víctimas de Casanare.
«Seguimos activos en la vida pública, no dejamos la política porque servir sigue siendo nuestro pilar«, expresó, al recordar el escenario que vivió su municipio y el departamento bajo el yugo de las Autodefensas Campesinas de Casanare (ACC), comandadas por el temible Héctor Buitrago, alias “Martín Llanos” en el centro y sur de Casanare y bajo el dominio guerrillero en el norte.
«Fui condenada como paramilitar, pero nunca fui amiga de Martín Llanos. Las veces que lo vi fue a punta de pistola», dijo con firmeza.
Su voz hoy: víctima, no cómplice
En la entrevista, Aleyder Castañeda sostiene que su condena fue resultado de un contexto político de presión internacional durante las negociaciones del TLC en el gobierno de Álvaro Uribe, donde —afirma— se buscaba cumplir rápidamente con una cuota de «parapolíticos» para mostrar resultados a Estados Unidos.
Así lo explicó: «Fuimos víctimas de los paras, pero también de una justicia que necesitaba cumplir una cuota de condenados para avanzar en acuerdos internacionales», denunció. Y muy dolida aún expresó “Nos jodió la vida, nos llevó a la picota pública, y nos mostró como paramilitares”.
Reiteró que: «Fui condenada como paramilitar, pero nunca fui amiga de Martín Llanos. Las veces que lo vi fue a punta de pistola», dijo con firmeza.
“Yo soy la más interesada de que “Martín Llanos” hablé, que diga si yo fui su amiga, cuándo fui su amiga, como fue ese cuento, porque yo a mis amigos los invito a tomar café en la casa y ellos a la mía. Las veces que vi a “Martín Llanos” fue a punta de pistola… nunca en la vida podía haber sido amigo de él, en las condiciones en que ese señor nos tuvo sometidos. Entonces seguimos paraditos igual. Convencidos de que este país merece tener un futuro diferente”, afirmó con pleno convencimiento.
Aleyder en el Comité de Paz y Reconciliación de Casanare
Hoy Aleyder forma parte de un Comité de Paz y Reconciliación de Casanare, que impulsa el derecho de las víctimas a conocer la verdad y en consideración a que el gobierno designó a “Martín Llanos” gestor de Paz, espera que las víctimas de Casanare tengan también la oportunidad de lograr la verdad de lo sucedido.
Reconoce los avances que han tenido otras regiones del país tras acuerdos de paz, pero señala que Casanare sigue esperando. Rememoró que con la Ley de Justicia y Paz los “paras” del Magdalena Medio se acogieron y con el Acuerdo de Paz de 2016, lo hizo la guerrilla de las Farc, pero en el caso de Casanare, las ACC no lo hicieron y esto ha afectado a las víctimas conocer la verdad de sus muertos y desaparecidos.
«Mi hijo adoptivo desde los 9 años, quien perdió a su padre (desaparecido) y a su madre (asesinada) en la guerra, merece saber dónde está su cuerpo. Como él, más de 70 mil víctimas en Casanare del grupo criminal esperan reparación.»
También pidió un nuevo marco jurídico que permita a excombatientes como “Martín Llanos” acogerse a procesos de verdad, dado que hoy no existe un mecanismo para quienes no se desmovilizaron en la Ley de Justicia y Paz de 2005 ni fueron cobijados por el Acuerdo de Paz de 2016 (ley1802).
Sobre alias “Martín Llanos”, cautelosa pero esperanzada:
Aleyder reconoce cambios en la actitud de alias Martín Llanos, a quien percibe más pausado y reflexivo. «Verle la cara, en reunión virtual, hoy es distinto a lo que otrora fue. «Hoy se le ve diferente, más pausado. Parece tener el deseo de decir la verdad. Si eso es real, hay que permitirlo. No es solo por él, sino por todas las madres que siguen preguntándose dónde están sus hijos.»
“Él también busca su libertad. La cárcel lo cambia a uno y uno que vivió ese escenario, le cambia el pensamiento. Quiero pensar que él sí quiere contribuir a la paz, la verdad y la reconciliación”, agregó.
Sin embargo, lanzó una advertencia que retumba: «Muchos no quieren que hablen. Como ha pasado en otros casos, hay quienes usaron los grupos paramilitares para cometer delitos atroces y no quieren que se conozca esa verdad incómoda.»
Por eso también pidió protección efectiva de la Fuerza Pública y condenó los panfletos que circulan promoviendo ideas de limpieza social. “No podemos volver a los tiempos donde la violencia privada sustituía al Estado.»
Aleyder buscando ser admitida en la JEP
En cuanto a su situación jurídica, Aleyder Castañeda no renuncia a insistir en una revisión ante la JEP, convencida de que su historia, como la de tantos en Casanare, no puede ser contada solo desde el expediente penal.
Si bien en la justicia ordinaria el camino se agotó, el Acuerdo de Paz de 2016 contempló no solo el escenario de que la guerrilla se sometiera a la JEP sino que también los agentes del Estado lo puedan hacer. Y en su condición de exalcaldesa tiene la posibilidad de hacerlo.
Consideró insólito que mientras miembros de la guerrilla de las Farc puedan acceder al Congreso, los que fueron víctimas del paramilitarismo y están condenados por ello sin haber sido paramilitares, estén excluidos de participar activamente en mecanismos de elección popular.
¿Quién es Aleyder Castañeda?
Aleyder Castañeda Ávila fue elegida alcaldesa de Monterrey para el periodo 2004–2007. Durante su campaña, fue vinculada a las Autodefensas Campesinas de Casanare (ACC) y se le atribuyó la firma del denominado «Pacto de Casanare».
En 2011, fue condenada por la Justicia Penal Ordinaria a 78 meses de prisión y 3.000 salarios mínimos de multa por el delito de concierto para delinquir agravado.
Intentó en 2017 acogerse a la JEP en calidad de tercera civil, pero su solicitud fue rechazada por falta de aportes tempranos a la verdad.
Hoy, 20 años después, sigue defendiendo su derecho a esclarecer su nombre y a contribuir a la reconstrucción de la memoria histórica de Casanare.
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